Otro año mas el Maratón Sierra Norte organizado por el Club Madroño, como como en ediciones discurre por una de las zonas mas bonitas y menos conocidas de la sierra de Madrid. Este año tocaba la XII edición y otro año mas acudimos a la cita con este maratón, como ya deje constancia en el blog tiempo atrás maratón 2006 y maratón 2007.

Son las 6:30 de la mañana y el despertador no perdona, es hora de levantarse y rematar todos los preparativos para el maratón. Meto las bicicletas en el coche y me dirijo a buscar a Raquel para salir de Madrid hacia la Sierra Norte. Este año la salida toca en la urbanización Cotos de Monterrey del municipio de Venturada donde llegamos sobre las 8:30. Llegamos justo a tiempo para ver el ambiente de Mountain Bike que se respira por todos lados y ver la salida de los participantes con piel de gallina, ¡Ya esta en marcha un año más el maratón!

Nuestros amigos del Altillo encabezan el maratón un año mas

Este año como los últimos somos unos mandaos y vamos allá donde podemos echar una mano lo mejor que se y por supuesto siempre con una sonrisa. En esta ocasión el objetivo era guardar una puerta para que estuviera abierta durante la carrera sin ningún problema y en el momento de acabar el maratón dejarla cerrada como la habíamos encontrado como es lógico en estos casos. Después de tener claro el lugar donde dirigirnos llegamos a la cabrera, preparamos las bicicletas y en sentido contrario a la maratón nos encaminamos hacia el punto indicado cruzándonos con algún despistado. Nos colocamos en nuestras posiciones y nos disponemos a animar y disfrutar con el paso de todos los valientes ciclistas que otro año mas se han atrevido a afrontar esta aventura por la Sierra Norte que me consta que es dura y exigente.

Mientras estamos disfrutando bajo el sol del veranillo que nos azota aparece otro personaje de esos que no faltan nunca en una carrera que se precie, ya sea Mountain Bike, orientación o cualquier otra modalidad que se practique en las montañas. Este personaje no es autóctono únicamente de la Sierra Norte si no de todo Madrid y seguramente también de otros puntos de la geografía española donde no he tenido la experiencia de organizar nada. El ganadero, para todo aquel que haya tenido el gusto de cruzar unas palabras con alguno de ellos ya sabrá lo que pasa, para el que no paso a transcribir a grandes rasgos mis palabras con él.

• ¿Quien ha marcado todo esto de las bicis?
• Nosotros, para una carrera de Mountain bike
• ¿Con permiso de quien?
• Con permiso de la Comunidad de Madrid, Medio Ambiente, etc.
• Esto son fincas particulares, por aquí no se puede pasar, os creáis que podéis ir por cualquier sitio, etc.
• Tenemos todos los permisos y estamos autorizados a pasar por todos estos caminos.
• Ahora mismo voy a ir a llamar al Ayuntamiento por que esto no puede ser así.
• Bueno llame usted a quien quiera ayuntamiento o Guardia Civil o quien mas guste.

La conversación fue un poco mas extensa pero la considero repetitiva, aunque esto es una muestra de lo que paso y pasa habitualmente con esta especie autóctona de nuestras sierras, la conversación da vueltas sobre el mismo tema y se van a llamar al Alcalde o concejal de turno que es amigo para quejarse un poco, pero nada de oír hablar de la Guardia Civil u otro organismo competente.

Fuera de anécdotas divertidas que tiene toda carrera que se precie la mañana transcurrió con tranquilidad hasta alrededor de las 14:00 paso el último corredor por nuestro punto y pudimos recoger el tinglado,  montamos en las bicis y a recoger cintas y flechas de vuelta a nuestro coche en la Cabrera. En este trayecto nos cogió el vagón de cola formado por un nutrido grupo de miembros del club Madroño recogiendo todas las cintas del recorrido. Una vez en el coche decidimos emprender camino a Madrid puesto que Raquel no había dormido bien y tenía un estado gripal con todo el cuerpo dolorido a pesar de lo cual aguanto las horas de espera como una jabata.

Esta entrada tiene como objetivo no solo contar mi experiencia dominguera si no reconocer a los grandes protagonistas del maratón. Los participantes son los grandes beneficiarios y sin los cuales no tendría sentido este maratón, pero los grandes protagonistas son la junta directiva del Club Madroño y todas las personas que están a su alrededor que trabajan durante meses para lograr sacar este proyecto adelante. Finalizando con un fin de semana que empieza el Jueves o antes y se dan una paliza mayúscula, como si dieran 4 o 5 vueltas al circuito. Ellos son los grandes artífices de que este pequeño circo que montamos una vez al año tenga éxito.

Gracias a todos los que están y han estado en algún momento al frente del Maratón Sierra Norte y hacen posible que siga siendo una realidad año a año.